W(EED)

"PORQUE ERES TÚ LA MELODÍA DE MIS CANCIONES"

EMPECEMOS CON UN PARA SIEMPRE

Hace un año empezó todo. Empezó nuestra historia.

Recuerdo que yo había salido del examen de Francés, Ana me viniera a recoger y nos juntáramos todas en zalaeta. Después de estar allí un buen rato nos fuimos a dar una vuelta. Ivana, Mariña, Ana, Julia, Alba y yo. A lo que en un momento comenté: “no necesito a nadie más, vosotras sois con las que quiero bajar siempre, nadie sobra ni nadie falta, vosotras”. Todas aceptasteis esa idea y la apoyabais. Al final de la tarde acabamos en maestranaza, donde nos empezamos a sacar fotos, sin saber que esas serían las primeras del resto de nuestras vidas. El cinco de Septiembre de dosmilonce empezó esto. Esto que llevamos un año construyendo. Nacieron ‘LAS SEIS’. Tan distintas y a la vez tan parecidas.

Desde ese día ya era rutina bajar las mismas. Siempre juntas, en cada cumpleaños, en cada anécdota o cada tontería. Allí estábamos, las seis, las inseparables. Discutíamos, pero al minuto ya nos estábamos riendo. Que nadie sabe donde hemos aprendido a sonreír así cuando estamos juntas.

Aunque ahora también bajen con nosotras las Andreas y Marina, que seamos ‘Las waloperas’, las mejores amigas del mundo mundial. Sabemos que nosotras somos otro mundo aparte. Que aunque tengamos a las seis un poco abandonadas, nunca morirán. Es algo especial. Porque he pasado momentos increíbles a vuestro lado, me habéis tenido que aguantar millones de veces y que sinceramente, no encuentro a nadie mejor que vosotras para compartir el resto de mi vida. Joder, que solo nosotras podemos estar horas hablando de tonterías sin parar de reír, que nos entendemos solo con una mirada. Somos de esas de las que se imaginan pasar el resto de la vida juntas, imaginando una casa donde podamos vivir todas y cosas así, que a lo mejor a la gente le puede parecer una tontería, pero para nosotras es algo especial. Y es que no me imagino una vida si no es a vuestro lado. Que os necesito a cada una, con sus mil defectos y vuestras escasas virtudes. Cuando me ponéis nerviosa es imposible que no se me escape una colleja, pero es que otras veces, soy incapaz de no comeros a besos.

Que lo sabéis todo, que os quiero y que no os cambiaría por nada del mundo.

"Desde el principio hasta el final, una para todas y todas para una"

ORGULLO BLANQUIAZUL

Hoy no sé por qué, mientras estaba en Riazor, me vino a la cabeza la palabra ‘orgullo’. Mientras veía como mi equipo no daba hecho nada en claro, le quitaban la pelota a la primera de cambio y no encajaba el gol de la victoria, que el que sostenía el micrófono se dejaba la voz y que la gente de la grada respondía con fuerza. Cuando miraba para Andrea y la veía nerviosa, sin parar de animar. En ese momento me acordé de lo orgullosa que estoy de ser del Deportivo. Orgullosa de mi padre, que fue quien primero le inculcó a mi hermano estos colores desde el día que nació, que no levantaba un palmo del suelo cuando le empezó a llevar al estadio. Y que luego llegué yo, que aunque le costó un poco más, me llegó a hacer sentir este equipo muy dentro. Orgullosa cuando oigo a mi padre decir: “yo siempre fui del Dépor, veía que la gente era del Barça o del Madrid pero yo, si ya sufría con mi Dépor, no necesitaba sufrir con nadie más.” Que cuando perdíamos, las cenas eran más calladas de lo normal, pero cuando ganábamos era pura fiesta. Orgullosa de que toda mi familia sea del Dépor, de mi hermano que lleva su amor tatuado en la piel. Porque sé que unos cuantos son fieles a estos colores, que cantan las canciones desde el corazón, y es que prefiero pocos de verdad que muchos de mentira. Estoy orgullosa de la afición que este escudo tiene detrás, de que el equipo humilde se hizo paso entre los gigantes y que tuvo a Europa a sus pies, y es que aunque ahora no sean los años de oro, yo sigo estando orgullosa. De ese Juan Carlos Valerón que pone al estadio en pie cuando se retira, que cuando está Dani Aranzubia en la portería, yo respiro más tranquila. De estos nuevos fichajes que suena irónico que sean portugueses. Orgullosa de que en los peores momentos en mi ventana ondeara una bandera del Dépor, que una placa en el baño donde ponga que en esta casa vive un hincha del R.C Deportivo de la Coruña lleve más tiempo aquí que yo. Orgullosa de que mis amigas se sepan las canciones sólo por oírmelas cantar a mí. Ese cosquilleo cuando entro en la habitación de mi hermano, que no se respira nada más que Dépor, cuando veo mi carpeta del colegio para este año que viene. Orgullosa de que los colores que defiendo, los llevo en el corazón todos los días del año, no solo noventa minutos a la semana.

¡ORGULLOSA DE SER DEL DEPORTIVO!

Dicen que los amigos son para siempre, pero con el detalle de que una amistad es como un planta, hay que cuidarla y regarla cada día.

Debes pensar que por haber estado la infancia a su lado te hace ser su mejor amiga para toda la vida, sobretodo cuando llega otra persona y te olvidas de todo lo que pasasteis. Que llega él, una persona que tu ves como tu salvación, la alegría de vivir. Con él estás como en un cuento de hadas, todo es perfecto y maravilloso. Pero te sigues olvidando de ella, de la que durante varios años fue tu mejor amiga. Te olvidas de preguntarle cada día cómo se encuentra, de darle un beso cada mañana o de reñirle cuando algo va mal. Te olvidas porque tú piensas que las amistades son para siempre, que ella va a estar ahí cuando tu bonita historia termine. Pero te equivocas, te equivocas una vez más. Las amistades son para siempre cuando merece la pena luchar. Cuando pase lo que pase, será una de las personas que llames cuando algo te atormente. 

Que estás dejando pasar demasiado tiempo, y que esta planta ya lleva marchita desde hace meses. Y ahora no pretendas aparecer de repente, como si nada hubiera pasado y como si este último año fuera igual que los anteriores, porque no. Todo ha cambiado, incluso pienso que tú has cambiado. Pero espero que cuando pase el tiempo, te des cuenta de lo mucho que dejaste atrás y que quizás no debiste haber olvidado.

Y es que cuando quieras darte cuenta, solo quedarás tú. 

COMO DOS (DES)CONOCIDOS

Y ya ha pasado mucho tiempo. Pero esto no empezó hace unos meses, sino mucho antes. Diría que un par de años antes. Te camuflabas entre la gente, hasta que poco a poco fuiste destacando más y más. Abriéndote paso hasta llegar al punto de que parecía que cuando pasabas, la multitud se abría hasta unirnos. Pasaste de ser un desconocido, hasta el punto de reconocer tu colonia por allá donde vas. Que pasaron los meses y nos fuimos conociendo, mucho. Hasta llegamos al punto de no poder dejar de mirarnos cuando estábamos juntos. Tuvimos momentos malos, claro que sí, pero siempre los conseguimos superar. Que en poco tiempo supiste reconocer cada uno de mis estados de ánimo, y aunque tus promesas resultaron ser falsas, yo seguiré sonriendo cada vez que me acuerde de cualquier momento contigo. 

Y es que ahora, volvemos a pasar a ser casi unos desconocidos. Sé que no te tiemblan las piernas cada vez que me ves, ni te sale esa risa nerviosa por no saber que decir, como me sigue pasando a mí. Pero espero que algún momento, te pares a pensar todo lo que te quise, que te quise de verdad , y que quizás esto podría haber sido algo grande.

PURA MAGIA

Mucha gente piensa que la magia es algo verdadero, algo inexplicable. Otros, en cambio, piensan que los mejores magos son los que practican mucho sus trucos, que simplemente es práctica y ser hábil. Yo nunca he sabido posicionarme en ninguno de los dos bandos.

Paso de seguir pensando que a las cinco ya he quedado con las niñas en el portal de Julia, como casi todos los días. Me ducho a toda prisa, me paso media hora frente al armario aún mojada mientras pienso que ponerme. Al final me acabo decidiendo con ayuda de mamá y ya vestida empiezo a peinarme y a maquillarme. Aún me estoy acabando de poner el rímel cuando oigo el timbre. Suena una voz baja de mamá desde su habitación: "¿Es para ti Clau?", le contesto que sí, que es Mariña que como siempre se adelanta cinco o diez minutos. Cojo el telefonillo y sin oír nada ya contesto con un: "Ya bajo Mari", a lo que ella responde con un simple: "Vale". Termino con el rímel, cojo el bolso y bajo saltando y canturreando por las escaleras. Llego al portal y si tengo suerte el ascensor estará en ese piso. Antes de bajar los dos últimos escalones me miro en el espejo, me arreglo un poco el pelo y ya veo a Mariña, que intento darle un susto abriendo la puerta. Bajamos hasta llegar al portal de Julia. Timbramos y nos dice que ya baja, a lo que nosotras ponemos la contraseña y abrimos la puerta para sentarnos en el portal. Ya sabemos como es Julia, su "ya bajo" significa "me queda un rato, podéis poneros cómodas". Como todos los días Ana e Ivana llegan tarde, un día es por culpa de una y al otro de la otra. Da igual. Diez minutos de retraso no se los quita nadie. Acaban llegando cuando Julia, Mariña y yo estamos dispuestas a salir. Nos acordamos que falta Alba, pero una se acuerda de que le dijo que hoy también llegaría tarde, que el autobús aún no había llegado y que cuando se estuviera acercando al centro nos llamaría para decirle donde estábamos. Salimos de allí hablando y riéndonos de cualquier tontería. Nuestra filosofía es así. Damos una vuelta aunque siempre acabamos sentadas en las mesas del puerto. Alba acaba llegando y se sienta con nosotras. Hay tardes que podemos estar allí sentadas un par de horas hablando, otras en las que salimos y damos una vuelta, sacamos fotos o nos vamos a cualquier sitio y nos ponemos a hablar. No paramos de hablar. A mi, sinceramente, me da igual donde estar mientras sea a su lado. Me gusta cuando alomejor están hablando y yo las miro. Ivana, como siempre está riéndose y si no es así, está concentrada comiendo. Julia está perdida en la conversación y preguntando todo el rato: "¿Quién es ese?" o lamentándose con su ya mítico: "Da igual, yo nunca me entero de nada..". Alba mientras, no para de hablar, gesticula con fuerza y pone caras feas para que todas nos riamos. Mariña, como casi siempre, estraría comiendo pipas, aunque también participa en la conversación con palabras raras o expresiones tontas. Luego me fijo en Ana que también está ahi aunque no se le nota tanto, ella también participa mientras juega con cualquier tontería o rompe papelitos o algo así.

Empezamos a subir para ir a casa, la primera en irse es Alba, que casi siempre se tiene que ir en bus quejándose de que su padre no la quiere venir a recoger. Alguna vez se ha tenido que ir corriendo porque lo perdía mientras todas le gritábamos y nos vamos riéndonos diciendo que nunca la habíamos visto correr así.

Seguimos subiendo y Julia se despide con un gran beso a todas, mete la contraseña y entra. A nosotras aún nos queda una larga cuesta que subir. Llegamos al San Brandan y Mariña y yo nos despedimos de Ana e Ivana que se meten por la Avenida de Hércules. Llegamos a la esquina de mi casa y me despido de Mariña también, aunque a veces me acompaña hasta el portal, le doy un beso y le digo la de: "Ahora hablamos todas". 

Llego a casa y saludo a mamá mientras ya estoy con el móvil en la mano para hablarles. Mi madre siempre me dice que no entiende que más nos tenemos que decir, si nos pasamos todas las horas que podemos juntas. Pasa la noche, apago el móvil y ya me meto en la cama dispuesta a dormirme, aunque soy de las personas que les cuesta quedarse dormidas y me quedo dando vueltas en la cama. Pienso que tengo una suerte inmensa de tenerlas a mi lado. Que no sé como hacen pero cuando sonríen se produce la verdadera fantasía. Que cada una con sus defectos y sus virtudes pero hemos aprendido a querernos tal como somos. Que las amigas de verdad no aparecen de un día para otro. Y después de ese largo día me quedo dormida.

Cada día igual, no me canso de estar con ellas porque desde que empezamos a quedar juntas, desde que nos burlábamos unas de las otras pero siempre terminábamos con un gran abrazo, desde que las empecé a querer como de si hermanas se tratase. Desde ese mismo momento, yo empecé a creer en la magia.

UN SENTIMIENTO

Dos equipos gallegos se posicionan ya en la máxima categoría del fútbol español. En primera división. El primer ascendido, el 27 de Mayo, Real Club Deportivo de la Coruña; segundo ascendido el Real Club Celta de Vigo, a día de hoy, 3 de Junio. Ascienden ambos a la misma categoría aunque para mi no debería ser la misma. 

El equipo coruñés desciende un año antes, lágrimas en el campo pero el equipo se retira con una gran obación, aplausos, bufandas en alto y escudos encima de los corazones. Desde el pitido final empieza la carrera, la carrera al lugar donde nunca debieron perder, primera división. La gente se empieza a concienciar de que solos no podrán volver, que necesitan el máximo apoyo posible, más aún del que recibieron las últimas jornadas que fue demasiado. Los hinchas blanquiazules no dudan un momento, a esta familia se suman más y más corazones, hasta sobrepasar los 25.000 abonados. 

El equipo vigués, cinco años ya en segunda división, está ahí. Con una gran lona cubriendo múltiples asientos de su estadio y que ni con esa ayuda, logran llenar los demás. Ahí están. Como siempre.

El Deportivo nos enseña el significado de la palabra humildad. Ganamos, seguimos ganando pero con la cabeza encima de los hombros. Ganamos aquí, ganamos en Balaídos y seguimos ganando. Imparables. Sin parar de sumar puntos. Cada jornada, Riazor está a rebosar, sufriendo cada minuto, como siempre. Cantando todo el estadio, de maratón a pabellón, aunque también responden los de preferencia con fuerza, y algunos de tribuna, timidamente a un 'DEPORTIVO ALÉ' que quedará grabado.

Si, el Celta de Vigo sigue ahí, ondeando su lona, llueva o haga calor, ella es la más fiel.

La hinchada que nunca se rinde se traslada sea a donde sea, sigue a su equipo hasta el más remoto rincón. Nunca le abandona. Los despiden y los reciben, aeropuerto o bus, hotel o estadio. Da igual. Demuestran que son incondicionales, que ellos mismos serán los que lleven a donde su escudo merece.

No me parece normal que estos dos equipos asciendan en igualdad de condiciones.

El equipo de Paco Herrera paga a equipos, como el Tarragona ya descendido, para que le ponga el partido lo más difícil que pueda al Deportivo para que no ascienda. Paga a unos cuántos equipos, incluso acuerda un empate para su última jornada para ascender con tranquilidad.

Pese a todo, el equipo de Oltra sigue luchando, ganando en el tiempo de descuento y demostrando a los vigueses que el dinero se lo pueden meter por donde les quepa. Que ellos son mucho más que eso.

El equipo herculino asciende con una remontada, teniendo los corazones de sus aficionados en la garganta, mas eso no les impide seguir animando. Llegue la celebración, nadie invade el campo, ni uno solo. Todos respetan y disfrutan del ascenso desde sus asientos, saltando, gritando y bailando, al ritmo que Rodolfo Bodipo impone desde el campo.

Llega el momento de Cuatro Caminos pero, ¿dónde está la fuente? ni siquiera se puede ver entre tanta gente. Todos esperan ansiosos la llegada de sus héroes. Y aunque su visita fue rápida, daba igual, estábamos en primera división.

El autobús azul y blanco llega a la Torre de Hércules, donde alrededor de 250 bengalas les esperan, siendo sostenidas por los Riazor Blues, los incondicionales, los que han dejado sudor y tiempo en aquellos tifos que han dejado asombrados.

Ningún incidente dentro ni fuera del campo, ejemplar afición que también recibe el premio al jugador número 12, merecidísimo.

Días después llega el momento de que los jugadores suban al balcón del Ayuntamiento de la Coruña. Micrófono en mano va pasando jugador por jugador.

Lendoiro es el primero en felicitar a la afición por su comportamiento y el apoyo al equipo, incondicional.

Oltra es el primero en recordar al eterno rival, aunque no sería el último.

Los héroes van hablando uno por uno, aclamados por la afición y vemos a un Riki con aptitudes de speaker y a un Alex Bergantños detallista recordando al Liceo, campeón de Europa.

Vemos a un Rodolfo y Xisco roncos de tanta celebración y tanto baile, o escuchamos a un Colotto con tono de despedida. Emocionan las palabras de Juan Domínguez diciendo que es el día más importante de su vida. Da igual que Bruno Gama sea portugués o que Borja haya metido el gol decisivo contra el Celta. Aythami también se acuerda de un Iago Aspas que no supo estarse callado y que nunca está de mal recordarle que somos los mejores. Los campeones.

Porque ellos han sido los que nos han devuelto a nuestro sitio, no dio tiempo a coger polvo. Ellos son los héroes, porque aunque algunos se vayan o se queden, hayan dado más o menos por este equipo, da igual, son ellos: Valerón, Aranzubia, Laure, Zé Castro, Manuel Pablo, Colotto, Aythami, Morel, Ayoze, Alex Bergantiños, Juan Domínguez, Jesús Vázquez, Borja, Guardado, Bruno Gama, Salomao, Lassad, Xisco, Riki, Lux, Seoane, Rochela, Pablo Álvarez, Saúl, Bodipo y Jose Luis Oltra.

¡SOMOS DE PRIMERA!

No diré que no quiero saber más de ti, sabes que necesito saber con quién vas y a dónde, pero si te digo la verdad, no tengo en mente seguir detrás de ti toda una vida. No fuiste lo que creí que serías, ni conseguiste lo que prometías. Quizás pensé que podías aprender a querer sin excepciones, veo una vez más que todos nos equivocamos. Hoy, quiero desearte lo mejor, quiero que sepas que no me arrepiento de nada, quiero que sepas que te quise, te quise de verdad. Quiero que entiendas que aún te necesito, pero que ya estoy pasando página, que intentaré dejar atrás el pasado, que prometo perdonar y olvidar, por respeto a quien hoy busca verme feliz y de hecho me hace feliz. Siempre te voy a recodar por ayudarme, tal vez sin querer, a vencer mis miedos. Gracias, además, por enseñarme a confiar en mi misma, la gente miente, todos buscan lo más fácil, incluso tú. Sabes como son las cosas, me conoces, y aunque quizá debería, mentiría al decir que te olvidé. Porque aunque hubieron mil decepciones de por medio, yo si logré quererte.

-¿A QUÉ HAS VENIDO?
-A ENCONTRARTE

Personas que llegan y no piden nada a cambio. Llegan sencillas, sin llamar la atención y se meten poco a poco dentro de ti. Te conocen y te encuentran las sonrisas, descubren tus secretos y se quedan a tu lado cuando más lo necesitas. 

Que cada día que pasa las quieres un poco más y cuando quieres darte cuenta ya son parte de ti, de tu rutina. Personas que lo dan todo por hacerte sentir bien y que son más bonitas que la tierra misma. Que por mucho tiempo que pase ya forman parte de tu vida y que por nada del mundo podrán salir.

MIS HEROÍNAS

Y daría todo por verlas sonreír, por escuchar sus "buenos días" cada mañana mientras se frotan los ojos aún soñolientos. Que vayan a desayunar despeinadas y que deboren las magdalenas de chocolate, que no tengan sueño por la noche y por la mañana se hagan las remolonas en la cama porque no quieren levantarse. Y es que me encanta pasar, una noche más, a su lado.

LA VIDA NO SE TRATA SOLO DE GANAR, SINO DE LO QUE SE APRENDE, Y SOBRE LO MUCHO QUE PUEDES CRECER, Y EL CAMINO ES MUCHO MÁS IMPORTANTE QUE EL LUGAR DONDE SE TERMINA